Llega un punto en el que entrenar más no es la solución. La clave está en entrenar mejor. Cambiar estímulos, variar la planificación y respetar los tiempos de descanso son estrategias fundamentales para seguir creciendo.

Estrategias para seguir avanzando:

• Cambios de rutina cada 6 a 8 semanas.

• Incorporar fases de deload o descarga.

• Controlar tu progreso con métricas reales (fuerza, repeticiones, tiempos).

• Complementar con movilidad, cardio y buena alimentación.

En Training te ayudamos a rediseñar tu entrenamiento con criterio, para que cada etapa tenga sentido y tu cuerpo siga respondiendo.

No se trata solo de cuántas repeticiones hacés, sino de cómo alimentás tu cuerpo antes y después. Una buena nutrición puede acelerar tus resultados, mejorar tu rendimiento y ayudarte a sentirte con más energía durante el día.

Principios básicos para acompañar tu entrenamiento:

• Consumí suficiente proteína (pollo, huevo, legumbres, yogur).

• No le temas a los hidratos complejos (arroz, avena, papa).

• Mantenete bien hidratado todo el día.

• Respetá las comidas post-entreno: son clave para la recuperación muscular.

¿Querés volumen, definición o simplemente salud? Tu alimentación tiene que estar alineada con ese objetivo. En Training también te orientamos para que lo logres.

Muchos abandonan el gimnasio por frustración o lesiones evitables. Por eso, te compartimos algunos errores frecuentes que vemos en Training y cómo evitarlos:

Errores más comunes:

• Entrenar todos los días sin descanso ➝ Tu cuerpo necesita recuperarse para crecer.

• Copiar rutinas de otros ➝ Cada persona tiene un nivel, objetivos y necesidades distintas.

• Ignorar el calentamiento ➝ Es clave para evitar lesiones.

• Usar mala técnica por cargar demasiado peso ➝ Más no es mejor.

Entrenar bien no es entrenar más, sino entrenar con inteligencia. Acá estamos para ayudarte a hacerlo.

Comenzar a entrenar es una de las mejores decisiones para tu salud física y mental, pero también puede generar dudas e inseguridad. Por eso, en Training nos enfocamos en acompañarte desde el primer paso, con rutinas adaptadas, instructores atentos y un ambiente sin prejuicios.

Tips para tus primeras semanas:

• Enfocate en la técnica, no en el peso. Es mejor aprender a moverte bien que levantar más.

• Respetá tus tiempos. El progreso es personal y constante, no inmediato.

• Escuchá a tu cuerpo. El cansancio es normal, el dolor no.

• Consultá siempre. Nuestros entrenadores están para guiarte.

Con constancia, paciencia y un buen plan, vas a ver cambios reales no solo en tu cuerpo, sino también en tu energía, postura y confianza.

Sabemos que entre el trabajo, la familia, los compromisos y el cansancio, muchas veces entrenar queda al final de la lista. Pero con una buena organización, podés encontrar tu momento y sostener el hábito sin sentir que es una carga.

Acá te dejamos algunos consejos para arrancar la semana con todo:

1. Agendá tus entrenamientos como si fueran reuniones

Bloqueá tus horarios de entrenamiento al principio de la semana. Es más fácil sostenerlo cuando ya lo tenés planificado. Tratá de que sean en los momentos del día donde sabés que rendís mejor.

2. Planificá tus comidas

Una buena alimentación potencia tu entrenamiento. Armá un menú simple y equilibrado para la semana, y si podés, dejá preparadas algunas comidas con anticipación. Vas a ahorrar tiempo y tomar mejores decisiones.

3. Descansá bien

Dormir entre 7 y 8 horas mejora tu rendimiento físico, tu recuperación y tu energía para entrenar. Hacelo una prioridad.

4. Hidratate durante el día

Tomar agua no es solo para el momento del entrenamiento. Mantenete hidratado durante toda la jornada para que tu cuerpo funcione bien y llegues a entrenar con más energía.

5. Ponete objetivos concretos y realistas

No hace falta entrenar todos los días para ver resultados. Empezá con lo que puedas sostener: 2 o 3 veces por semana, con constancia, ya es un montón.

6. Apoyate en el equipo

Si tenés dudas, no sabés por dónde arrancar o querés reorganizar tu plan, escribinos. Estamos para ayudarte a encontrar el mejor camino para vos.

Esta semana puede ser diferente… si la planeás diferente.

Entrená con intención. Organizate con conciencia. Y recordá: cada pequeño paso suma.

Entrenar no es solo mover el cuerpo: es hacerlo con intención, técnica y conciencia. Muchas personas, al comenzar o incluso con experiencia, cometen errores que pueden frenar el progreso o, peor aún, generar lesiones. En Training Salud Personalizada, te acompañamos para que evites estos desaciertos y disfrutes de un entrenamiento seguro y efectivo.

Entrenar sin una evaluación previa

Cada cuerpo es distinto. Iniciar una rutina sin una evaluación funcional puede llevarte a hacer ejercicios que no son adecuados para tu condición física actual.

No respetar los tiempos de descanso

Entrenar todos los días sin descanso no te va a llevar más rápido a tus objetivos. El cuerpo necesita tiempo para recuperarse, adaptarse y fortalecerse.

Imitar rutinas de redes sociales

No todo lo que ves en Instagram o YouTube está pensado para vos. Seguir ejercicios sin supervisión profesional puede generarte más frustración que resultados.

Descuidar la técnica por querer más peso o repeticiones

La calidad del movimiento es mucho más importante que la cantidad. Una mala ejecución puede provocar molestias o lesiones a largo plazo.

No variar el estímulo

Hacer siempre lo mismo estanca tus resultados. Incorporar variedad y progresión es clave para que tu cuerpo siga adaptándose y mejorando.

Olvidarse de escuchar al cuerpo

El dolor no es parte del progreso. Aprender a reconocer las señales de fatiga, tensión o incomodidad es fundamental para entrenar de forma saludable.

Recordá: entrenar bien no es hacer más, sino hacerlo mejor.
En Training Salud Personalizada, te guiamos paso a paso para que evites estos errores y construyas un camino de movimiento seguro, eficaz y adaptado a vos.

El cuerpo de la mujer atraviesa diferentes etapas y desafíos a lo largo de la vida: cambios hormonales, menstruación, embarazo, menopausia, entrenamiento, estrés… y en cada una de estas fases, es clave brindarle al organismo los nutrientes que necesita para funcionar de manera óptima.

Aunque lo ideal es obtener vitaminas y minerales a través de una alimentación equilibrada, muchas veces nuestro estilo de vida, el estrés o ciertas condiciones particulares hacen que necesitemos un refuerzo extra. Es ahí donde los suplementos juegan un rol fundamental.

¿Cuáles son los suplementos más recomendados para mujeres?

1. Hierro
Especialmente importante en mujeres en edad fértil. Ayuda a prevenir la anemia, mejora la energía y es clave en el transporte de oxígeno.

2. Calcio + Vitamina D
Fundamentales para la salud ósea, sobre todo en etapas de menopausia o baja ingesta de lácteos. La vitamina D mejora la absorción del calcio.

3. Magnesio
Ayuda a regular el sistema nervioso, mejora la calidad del sueño, disminuye los calambres musculares y colabora con el metabolismo energético.

4. Omega-3 (EPA/DHA)
Favorece la salud cardiovascular, reduce la inflamación y mejora el estado de ánimo. También es beneficioso para la piel y el cerebro.

5. Complejo B (en especial B6, B9 y B12)
Participa en el metabolismo energético, mejora el estado de ánimo y es clave durante el embarazo o en personas con dietas veganas o vegetarianas.

6. Colágeno con vitamina C
Favorece la elasticidad de la piel, la salud de las articulaciones y el tejido conectivo. Ideal para quienes entrenan o buscan mejorar el aspecto de su piel.

¿Es necesario suplementarse siempre?

No todos los cuerpos necesitan lo mismo. Por eso, antes de incorporar cualquier suplemento, es importante consultar con un/a profesional de la salud que evalúe tu estado nutricional, estilo de vida y objetivos personales.

En Training Salud Personalizada, creemos que el bienestar se construye desde adentro hacia afuera. La actividad física, la alimentación consciente y el descanso son pilares fundamentales, y los suplementos pueden ser un gran aliado en ese proceso.

El frío no es una excusa para detener tu progreso. Durante el invierno, entrenar en cinta de correr es una excelente opción para mantener tu actividad física, cuidar tu salud cardiovascular y seguir trabajando en tus objetivos sin exponerte a las bajas temperaturas.

En Training Salud Personalizada, adaptamos tus rutinas a esta modalidad, priorizando el movimiento consciente y progresivo. Ya sea para mejorar tu resistencia, trabajar tu técnica de carrera o simplemente mantenerte activo, el entrenamiento en cinta es una herramienta versátil que se adapta a vos.

¿Por qué elegir la cinta en invierno?

• Entrenamientos seguros y controlados: evitás superficies resbaladizas y cambios bruscos de clima.

• Seguimiento preciso: podés controlar tu ritmo, distancia e inclinación para lograr entrenamientos más efectivos.

• Ideal para todos los niveles: desde caminatas conscientes hasta sesiones de carrera con intervalos, la cinta se adapta a tu estado físico actual.

• Sin interrupciones: no importa si llueve, hace frío o está oscuro, siempre tenés un lugar cómodo para moverte.

Además, si entrenás con nosotros de forma personalizada, podés recibir rutinas pensadas específicamente para trabajar en cinta, con variedad de estímulos y objetivos claros.

Este invierno, quedate en movimiento. Entrená con nosotros desde casa o en el gimnasio, con el mismo compromiso de siempre: cuidar tu cuerpo y mejorar tu bienestar, paso a paso.